El Gobierno de Canarias autoriza construir un nuevo hotel de lujo en Fuerteventura en medio de la lucha por un desarrollo sostenible

La autorización del nuevo hotel

El Gobierno de Canarias ha concedido la autorización previa para la construcción de un nuevo hotel de cuatro estrellas con 956 plazas de alojamiento en el municipio de La Oliva, en Fuerteventura. Este trámite es un requisito previo a la autorización definitiva por parte del Cabildo de Fuerteventura.

Según el Gobierno canario, el proyecto "cumple con los estándares de calidad y eficiencia energética" establecidos por la Ley de Renovación y Modernización Turística de Canarias. Esta ley establece que solo se otorgarán autorizaciones previas para nuevas plazas de alojamiento turístico en Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife.

El conflicto con el Hotel Oliva Beach

Esta autorización se produce en medio de un conflicto entre el Gobierno de Canarias y el Gobierno central en torno a la gestión de las concesiones sobre el dominio público marítimo-terrestre. El Gobierno canario considera que tiene competencia exclusiva en esta materia, mientras que el Gobierno central defiende que las concesiones "compensatorias" son de su competencia.

Este conflicto se ha evidenciado en el caso del Hotel Oliva Beach, donde el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico ha declarado la caducidad de la concesión y ordenado la demolición del hotel. El Gobierno canario ha anunciado que recurrirá esta decisión ante los tribunales, defendiendo su competencia en la gestión del litoral.

Las protestas por un cambio de modelo de desarrollo

La autorización de este nuevo hotel llega apenas tres semanas después de las masivas protestas del 20 de abril en Canarias, en las que los ciudadanos exigieron un cambio en el modelo de desarrollo de las islas. Los manifestantes reclamaron, entre otras medidas, una moratoria hotelera y vacacional "total".

Tras estas protestas, el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, reconoció que las mismas habían evidenciado "todas las debilidades de nuestro sistema como archipiélago y nuestro sistema económico", y que "las cosas tienen que cambiar" y hay que revisar y "resetear" el modelo.

La respuesta del Gobierno de Canarias

Ante esta situación, el Gobierno de Canarias ha optado por seguir adelante con la autorización de este nuevo hotel, a pesar de las protestas y de la necesidad de un cambio en el modelo de desarrollo.

El consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad, Pablo Rodríguez, ha asegurado que el Gobierno canario seguirá "defendiendo el Estatuto y el derecho de Canarias a gestionar su litoral", en referencia al conflicto con el Gobierno central.

Sin embargo, las acciones del Gobierno de Canarias parecen ir en contra de las demandas de la población, que exige un cambio hacia un modelo de desarrollo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente y los paisajes naturales de las islas.

Un futuro incierto

La autorización de este nuevo hotel en Fuerteventura, en medio de un conflicto con el Gobierno central y de las masivas protestas por un cambio de modelo de desarrollo, genera incertidumbre sobre el futuro de las islas Canarias.

Mientras la población exige un giro hacia un turismo más sostenible y respetuoso con el entorno, el Gobierno de Canarias parece mantener un enfoque orientado a la expansión del sector hotelero. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de un diálogo abierto y de una mayor coordinación entre las instituciones y la sociedad civil para encontrar un equilibrio entre el desarrollo económico y la preservación del medio ambiente y la calidad de vida de los residentes.